Una de las grandes ventajas de la automatización, es que se puede tener en una misma cuenta múltiples sistemas diferentes entre sí.

De esta forma es poco probable que todos operen a la vez y sobre todo que todos pierdan a la vez. Así, suele suavizarse la curva de rendimiento, disminuyendo el drawdown máximo. Las ganancias de todos los sistemas se suman, pero las pérdidas se suavizan por compensarse con ganancias de otros sistemas, haciendo las rachas de pérdida menores y mejorando así el rendimiento del portfolio.